Cada día se revela un dato nuevo acerca de los sobornos ejecutados por la empresa brasileña Odebrecht a nivel de Latinoamérica, pero no solo eso, también aumentan las pruebas directas contra un personaje particular en nuestro país: Alan García Pérez.  

La semana pasada, el semanario Hildebrant en sus trece anunciaba que las iniciales de Alan García figuran en la agenda telefónica del condenado empresario brasileño Marcelo Odebrecht. La participación de las siglas ‘AG’ junto a la palabra Olmos, refiriéndose al proyecto hídrico en Lambayeque, da un panorama sombrío a García. Sin embargo, el expresidente desmintió estas posibles suposiciones mediante su cuenta de Twitter, en la cual posteó lo siguiente: 

Esta semana, dos altos ejecutivos, José Antunes Sobrinho y Gilberto de Azevedo Branco Valentim, y un exministro de Lula da Silva declararon que el expresidente Alan García fue un contacto importante para la planificación de sus negocios en el Perú. Los presidentes de las constructoras Galvão Engenharia y Engevix pagaron por consultorías a José Dirceu para lograr tener acceso en el mercado peruano, pero todo esto gracias a un complemento financiero por parte del gobierno central.

"La reunión con el presidente Alan García fue un punto importante (...) porque una parte del financiamiento no iba a sostenerse sin que el gobierno central ponga dinero en el proyecto", explicó Valentim, en referencia a un proyecto de ingeniería en Tumbes.

Sin embargo, la defensa de García fue "Sin pruebas solo queda embarrar: Recibí a todas las empresas que decidían invertir en el Perú. Ninguna me sobornó ni coimeo. A otros sí." Con esta respuesta, el expresidente evita declarar sobre la verdadera corrupción que existió en su segundo gobierno.  

Incluso, entre enero y febrero del presente año, la implicación de personas relacionadas con su gobierno como Edwin Luyo, presidente del Comité de Licitación de la obra y Jorge Cuba, ex viceministro de Transportes, quienes habrían recibido 7 millones de dólares en sobornos. También fueron detenidos el exfuncionario Miguel Navarro y Jessica Tejada, pareja de Cuba.

Es por eso que Alan García pasó a la lista de investigados por las presuntas irregularidades que se habrían cometido en la concesión de la Línea 1 del Metro de Lima. Pero, estas no son las únicas investigaciones, en la cual el expresidente se encuentra involucrado, puesto que existen más casos como: Caso el Frontón (1986), caso BBCI (1992), caso Narcoindultos (2008), caso Petroaudios (2009), entre otros.

Aún queda resolver muchos casos de corrupción, pero cada vez las revelaciones de Odebrecht nos acerca más a la verdad sobre los sobornos sucedidos durante el gobierno aprista. Queda esperar que Odebrecht nos envíe toda la información sobre las coimas realizadas, y ahí se sabrá verdaderamente quién mintió y quién no.

Por: Alexandra Ortega